«Sé tu mismo» y, para ello, «conócete a ti mismo», aplica el bisturí para entresacar tu persona de entre la gente y el microscopio para estudiarlo de cerca.
No, no queremos ser gente. En esta era de personalización, estamos casi obligados a ser nosotros mismos individualmente, a sacar la cabeza de ese magma de color y sabor indefinible al que llamamos gente.
Porque, además, … ¡Cómo es la gente!
La gente es nuestro primer candidato a cargar con el mochuelo de los propios defectos. La gente es quien desprecia nuestras, supuestamente, inteligentes aportaciones personales. La gente es quien ahoga nuestro protagonismo.
Pero, … ¿Cómo es la gente?
¡A quíen le importa! La gente es el paradigma de lo anónimo, de lo impersonal y no hay manera de asignarle una identidad definida. Y sin embargo, gran parte de lo que somos se encuentra ahí, en esa parte oscura, entre la gente. Y es más, el único sitio donde podemos colocar el foco para iluminar la parte oscura es ahí, entre la gente.
Somos gente. Nos conocemos en la gente. Gente diversa. Divergente.
¡ Bienvenido DIVERGENTE !, Gente diver al fin y al cabo.
Gente …. , a veces parecerían ser una montaña rusa de espejos que caprichosamente colocados nos rodean y nos muestran.
Descubrirse…, extraerse a cachitos de entre la gente que nos rodea y refleja.